LA PERSEVERANCIA
“Ni un cabello de vuestra cabeza perecerá:
con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas”.
(Lc 21,19)
1.
Se
dice que hoy muchas personas viven tan seducidas por el presente que parecen
totalmente despreocupadas del futuro. ¿A qué puede deberse esa actitud?
2.
También
es verdad que hay personas tan preocupadas por su futuro personal que llegan a
caer en la desesperación. ¿Cómo se las puede ayudar en este momento?
3.
¿Esa
frase de Jesús no puede inducir a algunas personas a adoptar una postura
frívola y desentendida de los demás?
4.
Por
otra parte, esa misma frase da por sentada la necesidad de la perseverancia.
¿Pero es fácil perseverar en una sociedad y en un tiempo marcados por la prisa
y por los cambios?
5.
Jesús
promete la salvación. ¿Pero que puede significar esa palabra para quienes hoy
se sienten ya salvados por la técnica?
6.
Todavía
se puede hacer otra observación a la frase de Jesús: ¿Qué puede significar hoy
la salvación de nuestra alma?
7.
¿Y
yo pido en la oración el don de la perseverancia y de la fidelidad a la palabra
y a la llamada de Jesús, nuestro Maestro y nuestro Señor?
José-Román Flecha