EL AGUA Y LA INJUSTICIA AMBIENTAL
El día 1 de septiembre hemos celebrado la Jornada Mundial
de Oración por el cuidado de la creación. Para orientar este tiempo que nos
lleva hasta el día 4 de octubre, fiesta de san Francisco de Asís, patrón de la
ecología, el papa Francisco nos ha dirigido un mensaje interesante que se puede
resumir en estos puntos.
1. El profeta Amós decía: “Que el derecho corra como el
agua, y la justicia como un torrente inagotable” (5,24). Dios quiere que reine la justicia, que es
esencial para nuestra vida de hijos de Dios, como el agua lo es para nuestra
supervivencia física.
2. En este Tiempo de la Creación, escuchemos la llamada a
estar al lado de las víctimas de la injusticia ambiental y climática, y a poner
fin a esta insensata guerra contra la creación.
3. El consumismo
está perturbando el ciclo del agua en el planeta. Los combustibles fósiles y la
tala de los bosques producen un aumento de las temperaturas y provocan las
sequías. La carestía de agua aflige cada vez más a nuestras casas. Industrias
depredadoras están consumiendo nuestras fuentes de agua potable, con prácticas
como la fracturación hidráulica, para la extracción de petróleo y gas, la
extracción descontrolada y la cría intensiva de animales. La "Hermana
agua", como la llama san Francisco, es hoy
«mercancía que se regula por las leyes del mercado»
4. ¿Cómo podemos contribuir al río poderoso de la justicia
y de la paz en este Tiempo de la Creación? ¿Qué podemos hacer nosotros, sobre
todo como Iglesias cristianas, para sanar nuestra casa común de modo que vuelva
a estar llena de vida?
5. En primer lugar, transformemos nuestros corazones. Es
la "conversión ecológica": la renovación de nuestra relación con la
creación, de modo que no la veamos ya como un objeto del que aprovecharnos,
sino que la custodiemos como un don sagrado del Creador.
6. Además, es urgente poner en práctica el respeto
ecológico en cuatro direcciones: hacia Dios, hacia nuestros semejantes de hoy y
de mañana, hacia toda la naturaleza y hacia nosotros mismos.
7. Hay que transformar las políticas que gobiernan
nuestra sociedad y modelan la vida de los jóvenes de hoy y de mañana. Las políticas
económicas que favorecen las riquezas escandalosas de unos pocos y la penuria
para muchos terminan con la paz y la justicia.
Este
año, el cierre del Tiempo de la Creación, el 4 de octubre, fiesta de san
Francisco, coincidirá con la apertura del Sínodo sobre la Sinodalidad. El
proceso sinodal nos invita a converger en un río majestuoso de reflexión y
renovación.