LA MENTE, EL CORAZÓN Y LAS MANOS
El sábado, 24 de
septiembre de este año 2022, el papa Francisco ha querido hacerse presente en
el encuentro sobre “Economía y Francisco”, que ha tenido lugar en Asís.
• El Papa ha
alabado a los jóvenes por su empeño en crear una nueva economía. Han
recibido muchas riquezas, pero no hemos sabido custodiar el planeta promoviendo
la paz. Los jóvenes están llamados a convertirse en los constructores de la
casa común, que está cayendo en la ruina.
• Una nueva
economía, inspirada en Francisco de Asís puede y debe ser amiga de la tierra y de
la paz. Se trata de trasformar una
economía que mata en una economía de la vida, en todas sus dimensiones.
• Tras recordar la vinculación de los jóvenes
con la misión profética en la Biblia, el
Papa les decía: “Gracias a Dios vosotros estáis ahí, no solo estaréis mañana.
Estáis hoy. Vosotros no sois solo el todavía-no, sois el ya, sois el
presente”.
• El Papa
recordaba cómo los jóvenes han reflexionado a lo largo del año sobre la
“economía de las plantas”. Es una buena idea. Las plantas saben colaborar con
todo el ambiente. Es preciso aprender de la humildad de las plantas, que con su
silencio y cooperación nos están enseñando un nuevo estilo de vida.
• Nosotros hemos
saqueado la tierra para aumentar nuestro bienestar, que solo es el bienestar de
un grupito. Ha llegado la hora de abandonar las fuentes fósiles de energía y promover
el desarrollo de fuentes con impacto cero y positivo.
• Un principio ético
universal dice que los daños han de ser reparados. Estamos dejando a las nuevas
generaciones una cuenta demasiado alta y demasiado injusta. Si hemos abusado
del planeta, tenemos que hacer sacrificios en nuestro estilo de vida.
• Pero junto al
crecimiento ambiental sostenible, hay que recordar sus dimensiones sociales, relacionales
y espirituales. No todas las decisiones ambientales tienen los mismos efectos
sobre los pobres. Hay que preferir las que reduzcan la miseria y la
desigualdad.
• Mientras tratamos
de salvar al planeta, no podemos ignorar al hombre y a la mujer que sufren. Hay que favorecer la acogida y la defensa de
la vida y no olvidar la soledad de la
persona, el invierno demográfico, la esclavitud de la mujer, el sufrimiento que
está llevando a tantos jóvenes al suicidio.
• “El ser humano,
creado a imagen y semejanza de Dios, antes de ser un buscador de bienes es un
buscador de sentido”. Hay que recuperar el patrimonio espiritual. “La técnica nos
enseña el qué y el cómo hacer, pero no nos dice el por qué; y por eso nuestras
acciones se quedan estériles y no llenan
la vida, ni siquiera la vida económica” .
• Al igual que Francisco de Asís, además de la mente y del corazón, hay que usar las manos para soñar, amar y crear un mundo de justicia y de paz.
José-Román Flecha Andrés