lunes, 17 de enero de 2022

ORACIÓN- Domingo 3º del Tiempo Ordinario. C 23 de enero de 2022

 

LLENO DEL ESPÍRITU

El Espíritu del Señor está sobre mí”

(Lc 4,18) 

Señor Jesús, la mayoría de la humanidad ni siquiera te conoce. Muchas personas han oído tu nombre alguna vez, pero no saben mucho más de ti. Aun para algunos de tus seguidores, tú eres solamente “un famoso desconocido”. 

 Sin embargo, en tu aldea de Nazaret te atribuiste unas palabras que se encontraban en el rollo de Isaías: “El Espíritu del Señor está sobre mí”. Aquella presentación resultó escandalosa para las gentes de tu aldea. Creían conocerte bien. Y de pronto tú eras una sorpresa para todos.

Al proclamar que el Espíritu de Dios estaba sobre ti, te identificabas con los antiguos profetas de tu pueblo. Pero todos en la aldea sabían que no te habías formado a los pies de algún conocido maestro. Y se preguntaban cuándo habías oído una llamada de los cielos.

Hoy sabemos que en eso precisamente consiste la fe. Creemos que tú has sido elegido y enviado por Dios. Eres el ungido, es decir el Mesías de Dios. Más aún, eres el Hijo de Dios. No eres un mensajero más. Eres el mismo mensaje y la palabra de Dios que se ha hecho carne.

El Espíritu de Dios está sobre ti. Reconocemos que tu palabra es creadora. No son nuestros proyectos los que dan soporte y firmeza a nuestro  mundo. No son nuestras ideas las que orientan a la humanidad. No son nuestros deseos los que pueden guiar a nuestra sociedad. 

Tú nos diste a entender que el Espíritu no te hacía poderoso como un emperador. No te otorgaba la autoridad de los sacerdotes del templo. No te concedía una fuerza mágica para eliminar todos los obstáculos de la vida. No te hacía fabulosamente invulnerable.

El Espíritu te enviaba por los caminos del mundo para que escucharas el lamento de los corazones desgarrados. Habías de anunciar la buena noticia del Reino de Dios a los pobres. Y pretenderías liberar a todos los esclavos y oprimidos. Que tu gracia nos ayude a aprender esa lección. Amén.

                                           José-Román Flecha Andrés