lunes, 17 de marzo de 2025

DOMINGO 3º DE CUARESMA C 2025

EXAMEN DE CONCIENCIA - Domingo 3º de Cuaresma. C 13 de marzo de 2025


LA CULPA Y LA CONVERSIÓN

  Aquellos dieciocho sobre los que cayó la torre de Siloé y los mató,

¿pensáis que eran más culpables que los demás habitantes de Jerusalén? 

Os digo que no. Y si no os convertís, todos pereceréis de la misma manera 

 (Lc 13,4-5)

 

1.      En tiempos de Jesús se pensaba que las desgracias caían sobre los malvados. ¿No sigue vigente esa idea en nuestro tiempo?

2.      ¿No es verdad que ante las víctimas de una catástrofe, nos preguntamos qué mal habían hecho?

3.      Por otra parte, ¿no nos escandalizamos al ver cómo prosperan los malhechores?

4.      ¿No hay personas que le preguntan a los creyentes de qué les sirve su fe si no les van bien sus negocios o el comportamiento de sus hijos?

5.      ¿Qué idea del hombre y de su conciencia moral reflejan estas y otras preguntas semejantes?

6.      Es más, ¿estas preguntas no revelan una idea equivocada de Dios y de su providencia?

7.      ¿Entiendo que esas palabras de Jesús me invitan personalmente a la conversión?

 

José-Román Flecha

REFLEXIÓN - Domingo 3º de Cuaresma. 23 de marzo de 2025

 

UN TIEMPO PARA LA ESPERANZA

“He visto la opresión de mi pueblo en Egipto y he oído sus quejas contra los opresores; conozco sus sufrimientos” (Éx 3,7-8). Así suena la voz que oye Moisés  en el desierto. 

Moisés había sido educado en un ambiente politeísta. Al oír una voz que sale de una zarza que arde sin consumirse, pregunta el nombre del dios que decide liberar a los hebreos. Y Dios responde que solo él puede ser reconocido como el dios que se compadece de su pueblo. 

La cuaresma nos invita a recordar nuestros pecados. Pero con el salmo responsorial también nosotros confesamos y proclamamos los atributos que distinguen a Dios: “El Señor es compasivo y misericordioso, lento a la ira y rico en clemencia” (Sal 102).

Sin embargo, los hebreos no siempre se mostraron agradecidos a la compasión de Dios.  Según san Pablo, “la mayoría de ellos no agradaron a Dios y sus cuerpos quedaron tendidos en el desierto” (1 Cor 10,5). Por eso, el Apóstol ruega a los corintios que “el que se crea seguro, se cuide de no caer”. 

LA HORA DE LA CONVERSIÓN

Según el evangelio de Lucas, Jesús se enteró de un hecho que había horrorizado a las gentes.  Unos peregrinos galileos habían sido masacrados en Jerusalén por orden de Pilato. Además, unos obreros habían muerto aplastados por el derrumbe de una torre junto al estanque de Siloé (Lc 13,1-9).

En su tiempo se pensaba que los males físicos respondían al mal comportamiento de quien los padecía. Así que las gentes consideraban como pecadores tanto a los asesinados por la crueldad romana como a las víctimas de una desgracia en el trabajo. 

En realidad, tambien hoy, cuando sucede una catástrofe, muchos se preguntan escandalizados: “¿Qué mal han hecho estas personas para ser castigadas de esta forma?”

Pero Jesús advirtió que las desgracias no siempre atrapan a los más culpables. Si fuera así, muchos de sus oyentes habrían sido asesinados o atrapados por los cascotes de la torre. Jesús sabe que todos somos pecadores y a todos se nos concede todavía la hora de la conversión.

EL FRUTO ESPERADO

En el evangelio de este tercer domingo de cuaresma, se incluye la parábola de la higuera estéril. Hace tiempo que no da fruto, así que el dueño decide arrancarla, pero el viñador intercede por ella. Si las noticias de hoy dan cuenta de la extensión del pecado, todavía se nos ofrece a todos la esperanza del perdón.

• “Señor déjala todavía este año”. La parábola sugiere que el pecado comporta siempre la esterilidad de la existencia. Sin embargo, se nos concede la oportunidad de reconocer con humildad nuestros pecados. Este es el tiempo para la conversión.

• “Yo cavaré alrededor… a ver si da fruto”. Todavía hay un espacio y un tiempo para la esperanza. No se puede justificar nuestra pereza. La  esperanza exige de nosotros un esfuerzo. La conversión requiere el trabajo del cultivo.

• “Si no, el año que viene la cortarás”. La esperanza se fundamenta en la misericordia de Dios, pero no puede llevarnos a la irresponsabilidad. Toda crisis nos ofrece la posibilidad de repensar  nuestra vida y tratar de producir el fruto que se espera de nosotros.    

- Padre nuestro, tú te muestras siempre misericordioso con todos los que invocan tu perdón. Ten piedad de nuestras culpas y concédenos una nueva oportunidad para que podamos cumplir tu voluntad. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

                                                                                   José-Román Flecha Andrés

CADA DÍA SU AFÁN - 22 de marzo de 2025

                                                                    

EL SERVICIO A LA VIDA

El día 8 de marzo peregrinó a Roma una amplia representación del Movimiento por la Vida, que celebraba los cincuenta años de su nacimiento. El Cardenal Secretario de Estado, Pietro Parolin presidió la santa misa en la basílica de San Pedro y leyó el mensaje que dirigía a los peregrinos el papa Francisco. He aquí las principales ideas.

 1.El Papa valora el servicio que los miembros del Movimiento por la Vida prestan a la Iglesia y a la sociedad y subraya “la solidaridad concreta, vivida con el estilo de cercanía y proximidad a las madres en dificultad por un embarazo difícil o inesperado”.

2. Con ello difunden la cultura de la vida, y lo hacen con franqueza, amor y tenacidad, manteniendo unidas la verdad y la caridad hacia todos, promoviendo en todos los niveles de la sociedad la cultura de la acogida y los derechos humanos.

3. Es cierto que han disminuido algunos prejuicios ideológicos y ha crecido entre los jóvenes la sensibilidad por el cuidado de la creación, pero lamentablemente se ha extendido la cultura del descarte.

4. Por tanto, es necesario que personas de todas las edades se dediquen concretamente al servicio de la vida humana, sobre todo cuando es más frágil y vulnerable.

5. Para los creyentes la vida humana es sagrada y ha sido creada por Dios para un destino grande y hermoso.

6. Pero creyentes y no creyentes han de reconocer que “una sociedad justa no se construye eliminando a los niños no deseados, a los ancianos que ya no son autónomos o a los enfermos incurables”.

7. Apostar por la vida es un «sí» a la civilización del amor, puesto que “liberar a las mujeres de las condiciones que las empujan a no dar a luz a su hijo es un principio de renovación de la sociedad civil”.

8. “La sociedad actual está estructurada en torno a las categorías de poseer, hacer, producir y aparentar”. Pero hay que agradecer “un proyecto diferente, que pone en el centro la dignidad de la persona y privilegia a los más débiles”.

9. “El concebido representa a todo hombre y mujer que no cuenta, que no tiene voz. Ponerse de su parte significa solidarizarse con todos los descartados del mundo. Y la mirada del corazón que lo reconoce como uno de nosotros es la palanca que mueve este proyecto”.

10. En el día internacional de la mujer, el Papa agradecía al Movimiento por la Vida su apuesta por las mujeres, por su capacidad de acogida, generosidad y valentía. “Las mujeres deben poder contar con el apoyo de toda la comunidad civil y eclesial”.  

Finalmente, el Papa recordó a Carlo Casini, que hizo del servicio a la vida el centro de su apostolado laical y de su compromiso político. Así lo demostró en una famosa intervención en la Universidad Pontificia de Salamanca.

                                                                                 José-Román Flecha Andrés

miércoles, 12 de marzo de 2025

DOMINGO 2º DE CUARESMA C 2025

FIESTA DE SAN JOSÉ - 19 de marzo

 

JOSÉ DE NAZARET

El día 19 de marzo la Iglesia Católica celebra la fiesta de san José, el esposo de María de Nazaret. Su figura, tantas veces olvidada, es realmente modélica para todos los cristianos. Y lo es por múltiples motivos.

1. José de Nazaret se presenta en los evangelios como un hombre justo. Trata de ajustar su vida a la voluntad de Dios. Y no pretende someter esa voluntad divina al imperio de la libertad y de la decisión humana.

2. Además, José sabe escuchar la palabra de Dios en el más respetuoso silencio. Una palabra que se le dirige en la oscuridad de la noche y en esa oscuridad existencial que hace difícil tomar las decisiones más arriesgadas. 

 3. José de Nazaret vive en un país sometido a un poder imperial, ajeno a la cultura y a los intereses de su pueblo. Una orden del imperio lo saca de su casa en un momento tan difícil como el de la proximidad del parto de su esposa.

4. José ha pasado por la persecución y la emigración. Ha tenido que salir de su tierra para defender la vida de su hijo, amenazada por un tirano celoso de su poder y promotor de una matanza de inocentes.

5. José de Nazaret confía su destino a Dios. No se considera como un héroe por haber librado a su familia de la muerte. Acepta los plazos que Dios ha marcado y las señales con las que va dirigiendo su camino.

 6. De una forma y de otra, José experimenta la soledad y el dolor humano más traumático. De hecho, pierde a su hijo y ha de salir a buscarlo con angustia, como ocurre a tantos padres en nuestro tiempo.

7. Ese trance doloroso es al mismo tiempo una profunda experiencia espiritual. José de Nazaret llega a pasar por la prueba que atraviesan todas las personas que creen haber perdido el rastro de Dios. 

8.  José y María “no comprendieron” las palabras con las que su hijo Jesús trató de explicar su permanencia en el templo. Y, a pesar de todo, guardaron aquellas palabras en su corazón.

José de Nazaret es el custodio de Jesús. Con razón se puede decir que es una figura en la que se refleja la identidad y la misión de la Iglesia. Y, por tanto, el camino y la vocación de todo cristiano.

- Padre de los cielos, que diste a Jesús y a María la fiel custodia de San José, despierta en nuestro mundo el sentido de la responsabilidad paternal, ayuda a nuestras familias a convertirse en iglesias domésticas y a la Iglesia en una auténtica familia. Y a todos nosotros ayúdanos a ser y actuar como custodios de nosotros mismos y de los demás,  de la tierra que nos has confiado y de tu misma honra y gloria. Amén.                  

                                                                        José-Román Flecha

EXAMEN DE CONCIENCIA - Domingo 2º de Cuaresma. C 16 de marzo de 2025


                 LA REVELACIÓN

  “Este es mi Hijo, el Elegido, escuchadlo” 

 (Lc 9,35)

 

1.      ¿Se puede decir que esta voz que baja del cielo es la principal revelación de la identidad y la misión de Jesús?

2.      En muchos ambientes se ignora o se niega abiertamente la divinidad de Jesús. ¿A qué puede deberse ese fenómeno?

3.      No solo eso. Aun como personaje histórico a muchos Jesús les merece menos respeto que Buda o Mahoma ¿A qué responde esa tendencia?  

4.      El autor Vittorio Messori escribió que Jesús es “un famoso desconocido”. ¿Se puede decir esto también de los cristianos?

5.      ¿El hecho de que la voz celestial presente a Jesús como el Hijo y el elegido por Dios significa algo para los que lo siguen?

6.      ¿Qué comporta para los discípulos de Jesús la invitación celestial a escucharlo?

7.      ¿En qué momentos de mi vida me ha resultado más importante escuchar la voz y el mensaje de Jesús?

 

                                                            José-Román Flecha

REFLEXIÓN - Domingo 2º de Cuaresma. C 16 de marzo de 2025

 

LA OSCURIDAD Y LA LUZ 

“Cuando iba a ponerse el sol, un sueño profundo invadió a Abrán y un terror intenso y oscuro cayó sobre él. El sol se puso y vino la oscuridad” (Gén 15,12.17).

Es precisamente en la oscuridad de la noche cuando Dios invita a Abrán a mirar al cielo. Dios le recuerda el tiempo pasado cuando lo llamó y lo sacó de su tierra de Ur. En el presente se encuentra en una tierra que desconocía. Pero Dios le promete un futuro en el que su descendencia será tan  numerosa como las estrellas del cielo. 

Frente a la oscuridad que envuelve a Abrán, el salmo responsorial canta el misterio de la luz que guía a los creyentes: “El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré? El Señor es la defensa de mi vida, ¿quién me hará temblar?” (Sal 26,1).

A los fieles de la ciudad de Filipos san Pablo les anuncia que Jesucristo transformará la humilde condición humana, según el modelo de su condición gloriosa” (Flp 3,21).

LAS COLUMNAS DE LA FE

Esa transformación de nuestra condición humana encuentra su modelo definitivo en la transfiguración de Jesús en lo alto del monte (Lc 9,28-32).  

• Jesús lleva consigo a una montaña a los tres discípulos predilectos: Simón Pedro, Jacob o Santiago y su hermano Juan. El Maestro sube al monte para hacer oración. La iniciativa divina del Maestro antecede y anticipa las decisiones humanas de sus discípulos.

• Mientras oraba, el rostro de Jesús cambió y sus vestiduras se hicieron relampagueantes a los ojos de sus discípulos. El evangelio de Lucas parece sugerir que la oración transforma lo humano y hace percibir la gloria de lo divino.

 • Junto a Jesús, los discípulos ven a Moisés y a Elías, rodeados de esplendor. Estas dos columnas de la fe de Israel hablan del éxodo que Jesús debía realizar en Jerusalén. La gloria que se manifiesta en el monte anuncia el  misterio de la muerte y resurrección del Señor.

 EL HIJO DE DIOS

En la oscuridad de la noche Abrán había oído al Dios que le ofrecía su alianza. Ahora, envueltos por una nube, los discípulos de Jesús oyen una voz que viene de lo alto para revelar la identidad de Jesús y exhortarles a prestar atención a su mensaje.   

• “Este es mi hijo, el escogido, escuchadle”. La voz que viene de lo alto revela a Jesús como hijo eterno de Dios. Jesús es más que un profeta. Su venida marca la plenitud de las antiguas esperanzas de Israel.  

• “Este es mi hijo, el escogido, escuchadle”. Además, se anuncia a Jesús como el elegido entre todos los hombres. En él se hace visible la figura del Siervo del Señor, y se cumple la misión redentora que le atribuía el libro de Isaías.

• “Este es mi hijo, el escogido, escuchadle”. Por fin, la voz de Dios se convierte en exhortación. Jesús transmite la palabra de Dios. Él es la misma palabra de Dios. Todos los que se encuentren con Jesús han de escucharle con atención.

- Señor Jesús, con mucha frecuencia nos atenaza la oscuridad y caemos en el desaliento. Pero, en medio de las tinieblas, tú eres la luz que nos libera del temor y del cansancio. Tú eres la palabra de Dios. Tú guías nuestros pasos por este camino que queremos recorrer en la esperanza. Bendito seas, Señor. Amén.

                                                                                  José-Román Flecha Andrés

CADA DÍA SU AFÁN - 15 de marzo de 2025

 

RESPONSABILIDAD ANTE LA POLICRISIS

Del 3 al 5 de marzo de este año 2025 ha tenido lugar la asamblea general de la Academia Pontificia para la Vida, bajo el lema “¿Fin del mundo? Crisis, responsabilidad y esperanzas”.

Fechado en el Policlinico Gemelli, el papa Francisco ha enviado a los académicos un mensaje que contiene puntos muy interesantes.

1. La Academia para la Vida abordaba la actual «policrisis», es decir esta coyuntura en la que confluyen guerras, cambio climático, problemas energéticos, epidemias, migraciones y la innovación tecnológica. Ante estas dificultades hemos de reflexionar sobre del destino del mundo y nuestra comprensión del mismo.

2. Si nos resistimos al cambio, seguiremos haciendo lo que hemos hecho con otras crisis. De hecho, hemos desaprovechado la pandemia del covid. Podríamos haber promovido la transformación de las conciencias y las prácticas sociales.

3. No podemos quedar anclados en nuestras costumbres y en nuestros miedos. Hemos de prestar atención a los conocimientos científicos, que nos revelan que nuestros juicios sobre la antropología y las culturas exigen una profunda revisión.  

4. Escuchar a las ciencias nos ofrece nuevos conocimientos sobre la estructura de la materia y la evolución de los seres vivos. Nuestra forma de entender la «creación continua» debe ser reelaborada. No será la tecnocracia la que nos salvará.

5. Favorecer una desregulación utilitarista y neoliberal a escala planetaria significa imponer la ley del más fuerte, una ley que deshumaniza.

6. El Papa cita a Teilhard de Chardin y su intento de dialogar con las ciencias, practicando el encuentro entre las diversas disciplinas. Él subrayó la relación entre todas las cosas, poniendo al homo sapiens en conexión con todo el sistema de los seres vivos.

7. En este año jubilar, recordamos que la esperanza es la actitud fundamental que nos sostiene en el camino. “No consiste en esperar con resignación, sino en tender con ímpetu hacia la vida verdadera, que va mucho más allá del estrecho perímetro individual”.  

8. Ante la irrelevancia de los organismos internacionales, preocupados por proteger intereses particulares y nacionales, debemos apoyar a “organizaciones mundiales más eficaces, dotadas de autoridad para asegurar el bien común mundial, la erradicación del hambre y la miseria y la defensa segura de los derechos humanos fundamentales”.

9. Hay que promover un multilateralismo que no dependa de las circunstancias políticas cambiantes o de los intereses de unos pocos y que tenga una eficacia estable. Se trata de una tarea urgente que concierne a toda la humanidad.

10. Que la esperanza nos ayude a caminar hacia “el nuevo cielo y la nueva tierra” como nos invita la Biblia (Ap 21,1).

                                                                                  José-Román Flecha Andrés

lunes, 3 de marzo de 2025

DOMINGO 1º DE CUARESMA C 2025

EXAMEN DE CONCIENCIA - Domingo 1º de Cuaresma. C 9 de marzo de 2025


                 LA TENTACIÓN

  No tentarás al Señor, tu Dios” 

 (Lc 4,12)

1.      Con mucha frecuencia hoy se hace broma y se ridiculiza la tentación ¿A qué se debe esa tendencia de nuestra cultura?

2.      ¿Cuáles son las tentaciones más habituales y más escandalosas en nuestra sociedad?

3.      ¿Qué consecuencias están desencadenando esas tentaciones, en la familia en el trabajo, en la política, en la información?

4.      ¿Qué habría que hacer para tratar de superar las tentaciones que nos alejan de la palabra de Dios?

5.      ¿Es posible educar a los demás -jóvenes o adultos- para que descubran las malas tentaciones y las superen?

6.      ¿Y qué hacer cuando las tentaciones no solo afectan a las personas, sino a las estructuras y a los pueblos?

7.      ¿Y yo me doy cuenta de lo que pido cuando ruego al Padre celestial que no me deje caer en la tentación?

                                                     José-Román Flecha


REFLEXIÓN - Domingo 1º de Cuaresma. C. 9 de marzo de 2025

  

SOLO DIOS ES DIOS

“Traigo aquí las primicias de los frutos del suelo que tú, Señor, me has dado”. Este  “credo” del israelita  añade un gesto que completa el rito: “Los pondrás ante el Señor, tu Dios y te postrarás en presencia del Señor, tu Dios” (Dt 26,9-10).

Dios había liberado a su pueblo de la esclavitud sufrida en Egipto. Justo era  agradecer la misericordia y la protección del único Dios. Solo él puede ofrecer la verdadera libertad. Y solo él merece la adoración del hombre.

En el salmo responsorial resuena la promesa de la protección de Dios a los fieles que lo buscan: “A sus ángeles ha dado órdenes, para que te guarden en tus caminos. Te llevarán en sus palmas, para que tu pie no tropiece en la piedra” (Sal 90,11-12).

Por su parte, san Pablo nos asegura que Dios es el Señor, el único Señor, “generoso con todos los que lo invocan” (Rom 10,8-13).

LA MENTIRA Y LA VERDAD

En este primer domingo de cuaresma meditamos las tres tentaciones que Jesús hubo de afrontar en el desierto.

• En primer lugar, el demonio presenta a Jesús un recurso mágico para superar el hambre. Si es hijo de Dios, podrá convertir las piedras en panes. Pero Jesús sabe que el verdadero alimento del hombre es la palabra de Dios, que da la vida y el sentido para la vida.  

• En segundo lugar, el demonio promete a Jesús el poder y la gloria a cambio de su adoración. Es mentiroso y ofrece lo que no posee y lo que no puede dar. El demonio se arroga un  poder y un derecho que no tiene. Solo se puede adorar a Dios.     

• En tercer lugar, el demonio se atreve a citar las palabras del salmo. Pretende que Jesús se deje caer desde lo alto del templo para hacer ver su calidad de Hijo de Dios. Pero Jesús sabe que no se debe tentar al Señor, para lograr un triunfo que siempre es efímero.  

El desierto es la imagen de nuestra debilidad y de nuestra verdad más profunda. En el desierto de nada vale refugiarse en la mentira. Las tentaciones de Jesús reflejan la verdad de su misión. Y también la honda verdad de los que aspiramos a seguirle por el camino.

LA FE Y EL SENTIDO COMUN

Evidentemente, el desierto no es solo un lugar inhóspito. Es un espacio para aprender la verdad. Ante las falsas promesas del demonio, es preciso recordar las respuestas de Jesús, que recogen la tradición de su pueblo. 

• “No solo de pan vive el hombre”. Mientras vamos de camino, nosotros pretendemos saciar nuestra hambre con alimentos que no pueden sustentarnos.  Y deseamos saciar nuestra sed de libertad con esas adiciones que nos mantienen como esclavos.

• “Al Señor tu Dios adorarás y a él solo darás culto”. Con demasiada frecuencia adoramos a los ídolos que nosotros mismos fabricamos. Prescindimos de Dios y después lamentamos la soledad en la que nos encontramos.

• “No tentarás al Señor tu Dios”. Tomamos unas decisiones que nos llevan al fracaso y después culpamos a Dios de habernos abandonado. Nos falta la fe, pero nos falta también el sentido común. No podemos imponer nuestra voluntad a Dios. 

- Señor Jesús, nosotros confesamos que solo Dios es Dios. En esta cuaresma, queremos escuchar la palabra de Dios que tú repetías al tentador. Que a lo largo de este año jubilar tu palabra nos ayude a caminar juntos en la esperanza. Solo así podremos llegar a ser servidores sinceros de la verdad que nos hace libres.  Amén

                                                                                José-Román Flecha Andrés

CADA DÍA SU AFÁN - 8 de marzo de 2025


CAMINEMOS JUNTOS EN LA ESPERANZA 

La Santa Sede ha publicado el mensaje que el papa Francisco había firmado el día 6 de febrero para la Cuaresma de este año 2025. 

Teniendo en cuenta el Año Jubilar que estamos celebrando, el Papa ha resumido sus reflexiones en la frase “caminar juntos en la esperanza”. Con ella trata de ayudarnos a “descubrir las llamadas a la conversión que la misericordia de Dios nos dirige a todos, de manera personal y comunitaria”.

1. Antes que nada, caminar. Al igual que los israelitas en el desierto, también nosotros vamos haciendo camino.  Todos somos peregrinos en la vida.

Como suele hacer, el Papa nos dirige unas preguntas: “¿Cómo me dejo interpelar por esta condición? ¿Estoy realmente en camino o un poco paralizado, estático, con miedo y falta de esperanza; o satisfecho en mi zona de confort? ¿Busco caminos de liberación de las situaciones de pecado y falta de dignidad?”

Además, nos exhorta a ver la realidad concreta de algún inmigrante o peregrino, para descubrir lo que Dios nos pide y para ser mejores caminantes hacia la casa del Padre. 

2. En segundo lugar, hemos de hacer camino juntos, nunca como viajeros solitarios. Caminar juntos significa ser artesanos de unidad, hijos de Dios, caminar codo con codo, sin pisotear o dominar al otro, sin envidia o hipocresía, sin dejar que nadie se quede atrás o se sienta excluido.

Vamos en la misma dirección, hacia la misma meta, escuchándonos los unos a los otros con amor y paciencia, sin ocuparnos solamente de nuestras necesidades. Debemos preguntarnos ante el Señor si tenemos “una actitud de acogida, con gestos concretos, hacia las personas que se acercan a nosotros y a cuantos están lejos”.

3. En tercer lugar, hemos de recorrer este camino juntos en la esperanza que no defrauda, que es el mensaje central del Jubileo.  

De nuevo, debemos preguntarnos: “¿Poseo la convicción de que Dios perdona mis pecados, o me comporto como si pudiera salvarme solo? ¿Anhelo la salvación e invoco la ayuda de Dios para recibirla? ¿Vivo concretamente la esperanza que me ayuda a leer los acontecimientos de la historia y me impulsa al compromiso por la justicia, la fraternidad y el cuidado de la casa común, actuando de manera que nadie quede atrás?”  

Como sugiere el logo del Jubileo, la esperanza es “el ancla del alma”, segura y firme. El Papa recuerda que Santa Teresa de Jesús escribió: “Espera, espera, que no sabes cuándo vendrá el día ni la hora. Vela con cuidado, que todo se pasa con brevedad, aunque tu deseo hace lo cierto dudoso, y el tiempo breve largo”  

Finalmente, Francisco pide que “la Virgen María, Madre de la Esperanza, interceda por nosotros y nos acompañe en el camino cuaresmal”.

                                                                                 José-Román Flecha Andrés

 

 

 

 

martes, 25 de febrero de 2025

DOMINGO 8º TIEMPO ORDINARIO C 2025

EXAMEN DE CONCIENCIA - Domingo 8º del Tiempo Ordinario 2 de marzo de 2025


EL CORAZÓN Y LA BOCA

  De lo que rebosa el corazón habla la boca”

 

 (Lc 6,45)


1.      ¿Vemos en nuestro ambiente que de verdad las palabras reflejan lo que brota del corazón de la persona?

2.      ¿Es posible constatar que las malas intenciones se reflejan en malas palabras y que el bien se manifiesta en la bondad del lenguaje?

3.      ¿A qué se puede deber la incoherencia de los sentimientos y el afecto con las expresiones de la persona?

4.      ¿Por qué puede responder este pensamiento a la experiencia de cualquier persona, creyente o increyente?

5.      Esta frase nos recuerda la literatura sapiencial de Israel. ¿Qué ofrece de nuevo en el discurso de Jesús?

6.      ¿Cómo podemos convertir este pensamiento en un motivo para nuestra oración personal?

7.      ¿Examino yo mi conciencia para ver cómo mis palabras reflejan la bondad o la malicia de mis sentimientos?

 

José-Román Flecha

REFLEXIÓN - Domingo 8º del Tiempo Ordinario. C 2 de marzo de 2025


COHERENCIA Y CARIDAD 

“El fruto revela el cultivo del árbol; así la palabra revela el corazón de la persona. No elogies a nadie antes de oírlo hablar, porque ahí es donde se prueba una persona” (Eclo 27,6-7). Tenía razón el Sirácida al usar la imagen del fruto por el que se conoce la salud del árbol.  Su consejo está lleno de sabiduría, porque es evidente que la persona se refleja al hablar.

 Se dice que las palabras se las lleva el viento. Eso es verdad cuando se trata de decir que las personas pueden desdecirse de sus promesas. Pero no es verdad cuando se trata de olvidar las ofensas o las calumnias que salen de una boca. Lo que decimos revela a los demás nuestros recuerdos del pasado, nuestros sentimientos actuales y nuestros proyectos para el futuro. 

La  imagen del árbol reaparece en el salmo responsorial, en el que se canta que “el justo crecerá como palmera y se alzará como cedro del Líbano; aun en la vejez seguirá dando fruto y estará lozano y frondoso” (Sal 91,13-15).

San Pablo escribe a los corintios que el Señor no dejará sin recompensa la fatiga y la fidelidad de quien conserva con firmeza la fe y la lleva a la práctica (1 Cor 15,57-58).

TRES CRITERIOS DE CONDUCTA

El evangelio de hoy recoge tres preguntas que el texto de san Lucas sitúa todavía en el marco del “sermón de la llanura” (Lc 6,39-45). En realidad, son unos criterios de conducta, válidos también hoy para los creyentes y para los no creyentes. 

• “¿Acaso puede un ciego guiar a otro ciego?”. Seguramente en las primeras comunidades algunas personas se ofrecían para orientar a los hermanos, aun sin tener conocimientos de la fe o, peor aún, observando  una conducta inadecuada. En realidad eso ocurre tambien hoy.

 • “¿Por qué te fijas en la mota que tiene tu hermano en el ojo y no reparas en la viga que llevas en el tuyo?”. Todos conocemos a alguna persona que critica duramente los defectos de los demás, pero parece que nunca se avergüenza de sus propios fallos.

• “¿Cómo puedes decir a tu hermano: "Hermano, deja que saque la brizna que hay en tu ojo", no viendo tú mismo la viga  que hay en el tuyo?”. Corregir a quien se equivoca  es una  obra de misericordia. Pero exige tanta coherencia de vida como  caridad hacia el hermano.

EL CORAZÓN Y LA BOCA

Tras una breve “parábola” sobre el árbol bueno que produce buenos frutos, Jesús ofrece un criterio muy sencillo para llegar a conocer la verdad de las personas:

  “De lo que rebosa el corazón habla la boca”.  Esa frase nos recuerda cómo se comportaba Jesús. Sus palabras y sus gestos reflejaban la conciencia que él tenía de sí mismo. Y hoy nos revelan la riqueza de su espíritu, su cercanía, su compasión y su ternura.

  “De lo que rebosa el corazón habla la boca”. Además, esa frase nos ofrece una clave para juzgar a los demás. Al hablar, no solo refieren los hechos que han visto u oído. Con sus palabras manifiestan también  los intereses y prioridades que los mueven.

  “De lo que rebosa el corazón habla la boca”. Y, finalmente, esa frase señala un ideal de vida para cada uno de nosotros. Lo que decimos manifiesta nuestros valores. No solo nos compromete ante los demás, sino que nos exige examinar nuestra conciencia.    

- Señor Jesús, te agradecemos los criterios de conducta que has ofrecido a la comunidad cristiana. Que tu palabra nos ayude a vivir siempre en la verdad y en la coherencia. Amén                                                                                                      José-Román Flecha Andrés

CADA DÍA SU AFÁN 2 de marzo de 2025

 

LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL EN LA PRÁCTICA

La nota “Antiqua et nova”, tras exponer los límites de la inteligencia artificial, examina diez cuestiones que se pueden resumir en estos puntos:

1. La sociedad. La IA podría promover el desarrollo humano integral. Pero puede oponerse a él y al bien común. Podría prolongar la marginación y la discriminación, crear nuevas formas de pobreza y agravar las desigualdades sociales.

2. Las relaciones humanas. La IA puede favorecer las conexiones en la familia humana. Sin embargo, podría obstaculizar el encuentro con la realidad y llevar a las personas a la insatisfacción en las relaciones interpersonales o al aislamiento.

3. Economía y trabajo. La IA está haciendo tareas que antes realizaban los seres humanos. Si sustituye a los trabajadores humanos en lugar de acompañarlos, existe el riesgo de un beneficio para unos pocos a costa del empobrecimiento de muchos

4. La sanidad. La IA puede ayudar a establecer un diagnóstico, facilitar la relación entre pacientes y médicos y ofrecer nuevos tratamientos.  Pero si se utiliza para sustituir la relación entre pacientes y sanitarios, se crearía un sistema impersonal y desigual.  

5. La educación. La IA puede ser un valioso recurso educativo. Pero podría provocar una dependencia de los estudiantes respecto a la tecnología. Y eso bloquearía su capacidad para realizar algunas actividades de forma autónoma y agravaría su dependencia de las pantallas.

6. La información. La IA puede ayudar a comprender hechos complejos o buscar la verdad. Pero puede generar contenidos manipulados e informaciones falsas que, al ser difícil de distinguir de los datos reales, pueden inducir fácilmente al engaño.    

7. Privacidad y control. La IA permite detectar el comportamiento de una persona a partir de pocas informaciones. Pero es necesaria la privacidad de los datos para respetar la dignidad de la persona y para que no sea identificada con un conjunto de datos.

8. Protección de la casa común. La IA puede mejorar nuestra relación con la casa común, prever eventos climáticos extremos y reducir su impacto. Pero los modelos actuales de IA requieren grandes cantidades de energía y agua y contribuyen a las emisiones de CO2.

9. La guerra. La IA podría ayudar a buscar la paz y la seguridad, pero las armas autónomas letales, capaces de identificar y atacar objetivos sin intervención humana directa, carecen de la capacidad humana de juicio moral y de decisión ética

10.La relación con Dios. Algunos buscan en la IA su plenitud, que solo se encuentra en la unión con Dios. La IA puede ser más seductora que los ídolos tradicionales: de hecho, estos tienen boca y no hablan, pero la IA puede “hablar”, o dar la ilusión de hacerlo.  

                                                                                        José-Román Flecha Andrés